Aquello que expresó, en los días del Sínodo, el Cardenal Reinhard Marx ("Las reflexiones surgidas en la asamblea de los obispos, en materia de matrimonio y familia, han de ser reflejadas en una pastoral familiar actualizada para que el itinerario sea cada vez más cristiano“) fue encarnado, en una especie de preludio de un compromiso total, en el Domingo de las familias. No es una casualidad que, el presidente de la Comisión para el matrimonio y la familia de la Conferencia Episcopal Alemana, el Arzobispo Heiner Koch, escribiera en el prefacio del subsidio de trabajo para esta jornada tan especial: "Dejémonos todos inspirar y alentar por la lucha llevada a cabo por los padres sinodales para que los esposos y las familias ardan con un fuego renovado por el cuidado pastoral ".

La Conferencia Episcopal Alemana, con motivo del evento, publicó en su sitio web una ayuda para el trabajo de todos aquellos que estuviesen interesados en contribuir a esta renovación pastoral: se trata principalmente de una visión general del documento final del Sínodo, de una entrevista con una pareja de esposos que, como consultores, participaron en la asamblea de octubre, y del informe publicado a raíz de una reciente reunión de las Conferencias Episcopales de Alemania, Francia y Suiza sobre el tema del matrimonio y de la pastoral familiar.