"El compromiso pastoral con las familias marginadas y pobres": es el nombre del seminario donde se estudió cómo apoyar a las familias menos afortunadas. Fue dirigido por el Sr. Benito Baranda y su esposa la Sra. María Lorena Cornejo. Dicho seminario celebró hace poco su ceremonia de clausura en el Pontificio Instituto Juan Pablo II de Roma.
Se celebró del 5 al 20 de mayo. El curso tuvo como objetivo el formar agentes pastorales y a las mismas familias, para que, a partir de una perspectiva integral, pudieran comprender la situación de los que viven en la pobreza y en la exclusión social. El principal propósito del seminario ha sido el hacer posible que sus participantes se formen pastoralmente y así puedan trabajar en esta difícil realidad de una manera más apropiada y eficaz.
La pareja que dirigió el seminario habló de su experiencia: ambos, después de obtener una maestría en el Instituto Pontificio Juan Pablo II, dedicaron casi 30 años de su vida a acoger con dignidad y amor a los más pobres de los pobres en las afueras de Santiago de Chile, siguiendo el ejemplo de San Alberto Hurtado.
